Diez meses han pasado y la señora María Guadalupe Pérez Ayala continúa exigiendo que se esclarezca el caso de desaparición de su hija Jovanna Dibanhi Aguilar Pérez, a quien el 25 de junio de 2021 se le perdió el rastro aunque el último sitio donde estuvo fue en la casa que alquiló con su pareja, en el fraccionamiento Latinoamericano, en Torreón.
Agotada física y emocionalmente, María Guadalupe relató este domingo que para iniciar la búsqueda de su hija, debió renunciar a su trabajo como operaria en una maquiladora. Ahora es su ex esposo, padre de Jovanna Dibanhi, quien le facilita dinero para pagar los camiones y continuar con las pesquisas en tanto que ella debe sortear otras urgencias, como la enfermedad de hija más pequeña.
Harta de no obtener respuestas María Guadalupe denunció negligencia de las autoridades. Acompañada por integrantes de la colectiva Madres Poderosas y representantes de la asociación Fray Juan de Larios, este domingo decidió junto a otras mujeres colocar el rostro de su hija por las calles y avenidas más transitadas de Torreón. Empapelar con su rostro algunas paredes le permite mantener además la exigencia de que no la olviden y trabajen en su búsqueda.
Esta madre afirma, las autoridades judiciales en el estado de Coahuila, y las radicadas en Torreón, no han actuado con celeridad para esclarecer el caso pues se trata de una joven sin recursos económicos o sin familiares influyentes que aceleren la investigación.
Los referentes nacionales en torno a la seguridad pública resultan preocupantes y la crónica cotidiana en torno a la desaparición de mujeres y los feminicidios no permite que la esperanza se afiance entre la población.
El caso de Debanhi Escobar, en Escobedo, Nuevo León, cimbró a la población pues aunque su desaparición cobró notoriedad nacional casi de inmediato, pasaron trece días para que las autoridades ubicaran su cuerpo torturado y sin vida dentro de una cisterna, no sin antes recoger los restos de otras cinco mujeres que fueron atacadas hasta quitarles la vida.
Entre Debanhi, la joven regiomontana, y Dibanhi, la chica de Torreón, pareciera que las diferencias son abismales, pero lo cierto es que se trata de casos similares toda vez que se trata de mujeres jóvenes que desaparecieron en un contexto de abuso y violencia.
A diez meses de interponer la denuncia, María Guadalupe dijo que además interpuso al menos cinco quejas en la Comisión de Derechos Humanos ante las omisiones o simulación de las autoridades y porque para obtener información como víctima ha tenido que insistir en que se realicen los trabajos de búsqueda.
Jovanna Dibanhi tenía 22 años cuando desapareció. Ella vivía con un hombre mayor de cuarenta años con el que pronto comenzó a tener problemas, eso le comentó a su papá.
Esta madre señaló a Gerardo López Rivera, encargado del caso de su hija pues refirió, intentó consolarla diciéndole que hay familias que tienen años buscando a sus hijas e hijos. Es decir, que tenga paciencia porque en el caso de Jovanna Dibanhi solo han pasado meses.
“Yo quiero que salgan las pruebas genéticas y otras periciales, son diez meses. ¿Por qué en Monterrey, por qué allá de volada… o sea, gracias a dios que la gente apoyó, pero eso es lo que necesita hacer uno? O ser un político importante o ser un famoso. Yo sí les dije: Saben qué, me tengo que ir a aventar de un puente con la foto de mi hija para que me hagan caso”.
Lejos de ver avances que le permitan acercarse a la idea de la recuperación de su hija, a María Guadalupe la llevaron a un lote baldío lleno de basura en la ciudad de Matamoros, donde con un escuadrón canino se improvisó una búsqueda, sin que le explicaran a la señora si existen indicios fundados de que el cuerpo de su hija pudiera estar allí.
Incluso explicó que su ex esposo recibió una llamada de su hija, dos meses después de su desaparición, hecho que fue informado en la oficina regional de la Fiscalía General de Coahuila, donde los funcionarios no siguieron una línea de investigación bajo el argumento de no tener autorización de un juez.
#MemoriaDiaria| María Guadalupe Pérez, madre de Jovana Dibanhi Aguilar Pérez desaparecida hace 10 meses, comparte un mensaje sobre las negligencias y problemas con la autoridad para ubicar a su hija. Está en la actividad de la Octava Caravana Internacional de Búsqueda. pic.twitter.com/l3CGlNDRef
— Heridas Abiertas (@heridasabier) April 24, 2022
“Quiero que ya aparezca mi hija, ya quiero resultados, estoy desesperada… A mí me dijeron en CEAS (Comisión Estatal de Atención a Víctimas), que porque a veces en un estado tienen más solvencia económica que en otro. ¿O sea que aquí no hay? Yo les comentaba por lo de Monterrey, que fue rápido todo lo que hicieron, pero no (me dijeron) que unos estados tienen más solvencia que en otro. ¿O sea que aquí en Coahuila no hay?”.